10. Trituradora
Coniza
Hola, cariño. A tu padre se lo ha tragado el tractor. Ya sí es broza, literal. Dicen que debió de pillarle despacio, porque no queda nada de él. No habrá entierro, ni tendremos que echar por ahí sus cenizas. Lo ha hecho todo él solo. Esas olivas ahora crecerán malas. Malas no, ¡crueles!, pero no seré yo quien las vea. Se venderán. Después del funeral iré a como se llame donde vives, pero antes pasaré unos días con mi hermana… aunque ni los baños de mar podrán curar a este saco de huesos rotos. ¡Ojalá me arranquen su olor!
—¿Diga? Hola, hija. Pues estoy cosiendo. ¿Tu padre? En el campo.